Cuatro días es mucho para disfrutar, por eso mismo aprovecha a fondo tu sistema operativo XP,
pues parece que a la Compañía creadora, sus fundadores y directivos no les sería de interés que siga vivo un sistema de tan lograda elaboración.
Da la impresión de que no sintieran orgullo por aquello que alguna vez diseñaron y que funciona perfectamente bien y que mucho tiempo, aún, le quedaría por seguir haciéndolo
Queda atrás la satisfacción que se puede llegar a experimentar cuando un producto salió bueno; pareciera no importar, no tener valor sentimental alguno, ni afectar el orgullo personal de ningún creador o empresa. Aquí lo importante -pareciera ser- es dejar paso a nuevas versiones (donde se suman sinfín de cambios anexos).
Entonces nos damos cuenta que los fines que se persiguen son otros que -lo quieran o no- incidirán en la parte económica de dicha empresa y también de otras quizás asociadas en la idea o mismo comercialmente, cuanto también afectan las finanzas de los usuarios obligados casi de manera forzada.
No hay por parte de muchos (hoy día) interés en mantener lo bueno e investigar en nóveles productos para continuar siendo una rentable empresa de negocios; sino más bien se percibiría que el objetivo es ingresar utilidades a costa de recursos más simples, como es el caso de renovar versiones de un producto en forma periódica, dejando atrás mejores productos para dar paso a nuevos, desconocidos y -tal vez- no tan correctamente logrados.
Sepan que no es un orgullo el trabajar con este tipo de metodologías ya que se convierte (a mi criterio) en una búsqueda solamente económica que no alienta la creación de nuevos logros, que desalienta al cliente, que deja desafortunada impresión sobre la capacidad de conocimiento y voluntad de hacer cosas nuevas de los citados empresarios y, según entiendo, deja al descubierto la posibilidad de pensar que todo es comercial y que lo que parece prevalecer es solamente el interés.
Jorge Horacio Richino.
